Las unidades de cuidados intensivos (UCI) de adultos en España, por lo general, son espacios cerrados y
regulados por los profesionales, en particular las enfermeras. Esto significa que “los de dentro”
(pacientes y profesionales de la salud) mantienen poco contacto (físico, emocional y de comunicación)
con los “de fuera” (familiares/allegados de los pacientes) y que éstos no tienen facilidad para acceder al
interior de la unidad. La relación se restringe a los horarios de visita y al momento de la información
médica. El médico (no sólo en España) es quién lidera la relación con los familiares
En la mayoría de las enfermeras entrevistadas se aprecian ganas de superar el papel histórico de
enfermeros como “técnicos sin pensamiento crítico”. Por tanto, se apunta el deseo de cambiar las
relaciones de poder dentro de las unidades de cuidados intensivos a favor de una mayor calidad en el
proceso de atención a los familiares. Las implicaciones que se derivan de esta voluntad de cambio deben
repercutir a diferentes niveles: Relación entre enfermeras de UCI y familiares: indicios para el cambio
Concha Zaforteza Lallemand Nure Investigación, nº 3, Marzo 2004